Arshile Gorky llegó a América en los años veinte y desarrolló un estilo de formas
biomórficas muy ligado al lenguaje de Picasso y de Miró4. Sus pinturas y dibujos
traslucían la profunda tensión de su estado de ánimo e influyeron de forma notable
sobre las jóvenes promesas americanas. Sin embargo, un grupo de pintores
como Bazoites, Motherwell y Pollock, se rebeló contra ese tipo de imaginación
simbolista y mitológica de origen surrealista y, en sus reuniones celebradas en el
taller del artista chileno Matta, entre 1942 y 1943, decidieron “integrar el espacio
del cuadro en el mundo físico”, haciéndolo “paseable”5 y rompiendo así con la tradición
europea de trabajar con formatos pequeños que interpretasen y miniaturizasen
el mundo exterior. Además, estos artistas habían trabajado para la Works
Progress Administration donde absorbieron tradiciones de origen extraeuropeo, como
la de los muralistas mexicanos –José Orozco, Diego Rivera y David Sequeiros– o las
procedentes de las pinturas primitivas de los indios autóctonos americanos.
Los críticos del momento, Harold Rosenberg y Clement Greenberg, serían los
responsables de construir el armazón teórico del expresionismo abstracto, pero lo
harían desde dos puntos de vista radicalmente opuestos. Sus contribuciones fueron
divulgadas por revistas como Partisian Review (1934-2003), que se encargarían no solo
de modelar la opinión intelectual americana sino de difundirla por el exterior como
parte de la estrategia política de Estados Unidos durante la Guerra Fría.
Con el término Action Painting, Rosenberg se refería a toda aquella obra de arte que
supuso una rebelión privada contra el materialismo burgués y un lugar donde el
artista dejaba marcada su huella a través de sus gestos sobre la materia pictórica y el
lienzo. Robert Richenburg, quien fue alumno de Hofmann tras la Segunda Guerra
Mundial, realizó Night Cascade (Cascada nocturna), 1961, bajo estos parámetros. Esta
obra pertenecía a su serie Dark paintings (Pinturas negras), producida desde mediados
de los años cincuenta para dejar constancia de sus experiencias angustiosas en el
frente de batalla, en el que participó primero como miembro del equipo de camuflaje
y después como ensamblador y desarticulador de explosivos y minas. En ella,
la aplicación del pigmento negro actúa como elemento estructurador y de enlace de
un juego interdimensional basado en el avance y retroceso de planos en el lienzo6.
4 Las Constelaciones de Miró estuvieron expuestas en el MoMA en 1941.
5 Block, Cor. Historia del arte abstracto 1900-1960. Madrid: Ediciones Cátedra, 1982, p. 161.
6 Richen, Robert. Evolution of the Dark Paintings. 1950-1960. Thomas McCormick Gallery, Chicago, 3 de mayo
- 29 de junio de 2002, p. 2.
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