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Trueque en las calles de Bogotá. Colectivo cambalache 1998
Museo de la calle. Cambalache en El Cartucho, Bogotá, 1998 El Veloz, museo de la calle. Intercambio itinerante. Bogotá 1998
a los problemas sociales, económicos y políticos que genera el
narcotráfico. Programas que contemplan la dimensión sagrada de
las plantas en la tradición de esas culturas.
MV: Manifiestas que esa tradición, como la naturaleza exuberante
del país, te maravilla. Fruto de ello, en el primer año de tu estancia
presentas la exposición El reencauche. Propiedades intelectuales
de las plantas locales, en un centro social de Bucaramanga.
FG: Muestro otra serie de pizarras en colaboración con
los asistentes al centro, cuyos textos se entremezclan con
dibujos trazados con tizas en los que aflora la labor relativa a
las propiedades de las matas locales… utilizo las plantas y su
representación como vía de conocimiento y de transformación
en un doble sentido individual y social… me arrimo a ellas desde
la sabiduría popular y desde el deseo de otorgarles una voz y una
expresión.
MV: Ello me recuerda unos lúcidos versos de Gary Snyder, cuya
posición estética y política, en el marco del discurso occidental
capaz de escuchar la voz del otro, ilumina el pensamiento
ecologista: “Nunca dieron a montañas y ríos,/árboles y animales/el
voto”. El editor14 apunta, que dos de las aportaciones fundacionales
de su literatura son la integración del universo budista en una
conciencia ética y el reconocimiento de montañas o árboles en la
categoría de expulsados, a cuya causa ha dedicado su poesía.
FG: Imagino las plantas como símbolos vivos de las relaciones
humanas y sociales. La naturaleza es fuente de sabiduría y
potencialidad creadora.
MV: En aquellos años y a lo largo de la primera década del 2000
te dejas guiar por nuevos viajes iniciáticos, por lo que llamas
“amor verde”, por la liana de los espíritus, por las revelaciones
sobre el chamanismo del antropólogo Michael Taussig, y
otras… Abres puertas a un mundo sensorial, profundizas en
estados de conciencia, exploras procesos de sanación, de
autodescubrimiento, al igual que ahora en Al borde del mundo…
mientras dibujas y dibujas plantas.
FG: Dibujar plantas me conecta con la vida y siempre me
he sentido acompañado por el ejercicio y por el gusto del
14. La mente salvaje. (Nueva antología). Poemas y ensayos, edición Nacho Fernández Rocafort, Árdora ediciones, Madrid 2016.