Stipo Pranyko
Stipo Pranyko (Jajce. Bosnia, 1930) es un artista nómada que pertenece a la nómina de la cultura desplazada yugoslava, surgida después de la Segunda Guerra Mundial. Su obra ha discurrido al margen de los circuitos comerciales del arte contemporáneo y se ha desarrollado en diferentes soportes, como el papel y otros materiales más humildes como la tela y la madera. Esta experimentación con estos materiales lo ha vinculado a movimientos artísticos de los años sesenta, sobre todo al arte povera, aunque su condición de hombre errante lo ha hecho constructor de sus propios territorios plásticos.
Sus obras se conciben como el equipaje móvil del vagabundo, pertrechos de la impedimenta del nómada: son flexibles, transformables, susceptibles de acoger los roces y las heridas de la vida, incorporando el desgaste y el deterioro como una más de sus marcas existenciales y consustanciales. Así la categoría del tiempo resulta determinante en la obra de Pranyko, que la incorpora y lee a través de metáforas poéticas continuadas, en permanente diálogo con la vida: la muerte, la enfermedad, la desaparición, el envejecimiento, el dolor, el sacrificio, el abandono… conforman el clima poético de su universo creativo.
En su obra en papel, los pliegues pasan a constituir un signo más de la composición. Los cuadros se enrollan o se pliegan para facilitar su transporte como un elemento más del ajuar básico de la vida. El material adquiere una espesa consistencia física y ética, en sus trazos, además de las señas de la biografía, resuena una memoria cultural antigua, y su consistencia y trabazón parece indicar que estamos ante una escritura o una cartografía vital más que frente a objetos artísticos. Papeles o cartón rasgados con las manos y pegados luego sobre una superficie plana o trazos de grafito arrebatados, muy gestuales y primarios en su agresividad y sencillez, configuran tropos de la herida, en los que el proceso creativo y la relación con el decurso de los días adquieren espesor físico y emocional.