Josef Koudelka
Koudelka
El debate de la fotografía entendida documento social o como una de las bellas artes pierde fuerza en algunos autores, que no cejaron en su empeño de documentar su tiempo sin, por ello, dejar de respirar las posibilidades estéticas, casi infinitas, de la fotografía. Josef Koudelka (Moravia, Checoslovaquia [actual. República Checa], 1938) empieza a fotografiar a poblaciones gitanas de Europa del Este en 1961. De su estancia en Rumanía, arriba a Praga un día antes de la Revolución de 1968, que documenta ampliamente, pero de manera casi furtiva. Esta serie de imágenes que muestran los enfrentamientos entre los soviéticos y los checoslovacos salen del país en 1969 a través de su amiga y colaboradora Anna Fárová y son distribuidas por Magnum a los medios más importantes del mundo, aunque sin autoría, para proteger su libertad. En 1970, aprovechando un visado de tres meses que le permitió seguir fotografiando a poblaciones gitanas del oeste de Europa, decide no volver a su país y refugiarse en Inglaterra. Permanece aquí hasta 1980, cuando se traslada a París y donde consigue la nacionalidad francesa en 1987.
Temas como exilio, nomadismo, inefabilidad, la crudeza del paso del tiempo… están presentes en su obra, en composiciones que incluso siendo escenas tomadas al pie de la letra del «instante decisivo», parecen haber sido conceptualizadas previamente. Esta exposición, es decisivo recordarlo, se realizó antes de la caída del muro, del desmembramiento de la URSS y de la escisión definitiva de Eslovaquia y República Checa.