Markus Lüpertz
La memoria y la forma
Markus Lüpertz nace en Liberec ( Bohemia) en 1941, pero muy joven se traslada junto a su familia a Alemania. Cursa estudios de Bellas Artes en Krefeld y en Dusseldorf y en 1961 se traslada a Berlín. En 1966, publica su “Manifiesto ditirámbico” y su pintura es bautizada también como “ditirámbica”, en un intento por definir la celebración exaltada, a través del canto, la danza y la ebriedad, de la fusión del hombre con la naturaleza. Los años setenta suponen un punto de inflexión en su investigación plástica; aparece una mayor estructuración en la composición, una búsqueda del equilibrio entre la estructura formal surgida de la abstracción y la interpretación figurativa.
En la decada de los ochenta comienza a experimentar con el volumen y surgen sus primeras esculturas. Recupera la figura humana en su producción, tanto escultórica como pictórica, con influencias tan diversas como el clasicismo griego, el arte africano, el cubismo o el surrealismo. Su obra junto con la de Baselitz, Immendorf o Kiefer, se enmarca dentro del llamado neo-expresionismo alemán que inició a principios de los años sesenta una estrategia de ruptura consistente en un rechazo de las tendencias predominantes americanas para potenciar las llamadas características “germánicas”.
En sus obras se entremezclan el diálogo con el pasado y con los mitos clásicos, un profundo sentimiento religioso, su amor por la poesía y la literatura. La presente exposición, presenta por primera vez un conjunto de 180 obras: 40 esculturas, 60 pinturas y 80 dibujos que recorren treinta años de su actividad creadora desde 1980 hasta la actualidad.