David Smith

ExposiciónIVAM Centre Julio González

A partir de los últimos años de la década de 1940 y a lo largo de los años cincuenta, David Smith (Decatur, Illinois, 1906 – Bennington, Vermont, 1965) elaboró una escultura más poética, abierta y lineal. En cierta manera, esto constituyó una narrativa estructurada con una caligrafía metálica tridimensional en la que se podían descubrir influencias de Picasso y del surrealismo. Desde finales de los años cincuenta hasta su muerte, a causa de un accidente de automóvil, realizó obras sólidas, de carácter monumental, concebidas para ser contempladas al aire libre. Esas esculturas que poseían una cualidad inestable y dinámica, opuesta a la densidad, ofrecían un lenguaje plástico específicamente americano, logrado a partir de la asimilación y experimentación sobre las propuestas europeas de vanguardia. De esa manera, a través de unas composiciones de aspecto provisional y fortuito en las que con frecuencia se subrayaba su carácter irónico, Smith formuló un lenguaje original, una “objetividad” escultórica que planteó, inicialmente, los problemas de integración del color y la forma y, posteriormente, el diálogo entre el peso y el volumen a partir de estructuras elementales. Un planteamiento artístico centrado en el metal, el material más representativo de la industrialización característica del siglo XX, que abrió nuevas vías y se situó en la base de importantes tendencias como el minimalismo.

La exposición organizada por el IVAM es la primera muestra antológica dedicada al escultor estadounidense en el estado español y se centre en la especial relación del artista con Europa, en particular, con la obra de Picasso y Julio González. Está formada por cincuenta esculturas realizadas entre 1933 y 1965, y se acompañan  de un conjunto de fotografías originales de Ugo Mulas que documentan la estancia del escultor en Italia en 1962 y en su granja de Bolton Landing. Con ocasión de la muestra se edita un catálogo con documentación de obra y sala y textos de Michael Brenson, Francisco Calvo Serraller y Carmen Giménez, curadora de la propuesta. El catálogo reune una antología de escritos del propio artista.