Plein Air N.Y., 1968
Acrílico sobre lienzo
243,5 x 493,5 cm (tríptico, medidas totales)
Valerio Adami (Bolonia, 1935)
Esta obra de Valerio Adami, un paisaje desierto de vida humana en la ciudad de Nueva York de finales de los años sesenta, nos recuerda las imágenes insólitas vistas en los medios durante las últimas semanas de máxima reclusión en nuestras casas, en las que los espacios públicos emblemáticos de diversas ciudades, habitualmente abarrotados, han cobrado otra dimensión, desconocida hasta ahora, sin la presencia humana, y, también, han cuestionado nuestro modelo de vida y de desarrollo.
Adami no sólo es heredero de la rica tradición pictórica italiana, desde el prerrenacimiento hasta Giorgio de Chirico y sus paisajes llamados ‘metafísicos’ de arquitecturas igualmente desiertas de presencia humana, es también un verso suelto en el movimiento denominado Pop Art que se expandió tanto en los Estados Unidos como en Europa a partir de finales de los años cincuenta del siglo pasado, llegando a su apogeo una década después.
Si bien Adami comparte algunas características del lenguaje pop, bien visibles en esta obra Plein Air N.Y., como son las figuras silueteadas por rotundas líneas negras y los colores planos, frescos y contrastados, estilo muy próximo al cómic de ‘línea clara’, no es menos cierto que su obra denota tanta preocupación por lo formal como por lo intelectual, y son constantes en buena parte de su producción las referencias a la poesía, la literatura, la filosofía o la historia, en forma de grafías.
Recordamos aquí las palabras de la profesora e investigadora Carmen Bernárdez Sanchís (1954-2018): “Adami se mantiene fiel al concepto que del dibujo tenían los artistas del Renacimiento: ser tanto la quintaesencia de la anatomía (de cualquier objeto, figura o paisaje), como la manifestación gráfica del pensamiento”.