Lajos Kassák y la Vanguardia Húngara
La muestra presenta el importante periodo constructivista de Lajos Kassák, cuya carrera polifacética encarnó el ideal vanguardista de trabajar todo tipo de arte: pintura, arquitectura, teatro, diseño y tipografía, sin dejar de lado la acción política. La exposición reúne cerca de cien obras, entre las que se incluyen 50 pinturas al óleo y composiciones de papel de Kassák, obras de otros artistas de su grupo como Sándor Bortnyik, Béla Uitz, Jànos Matthis Teutsch, László Moholy-Nagy, László Péri, Jozsef Nemes Lampérth, Lajos Tihanyi y Alfréd Forbàt. Se presentarán también los periódicos dirigidos por Kassák A Tett, Ma y Dokumentum, así como libros ilustrados por él, obras maestras de la tipografía. El catálogo de la exposición reproduce las obras expuestas y publica escritos de Krisztina Passuth, Mariann Gergely, Georges Daranyi y Emmanuel Guigon.
El pintor, escritor y poeta Lajos Kassák (Ersekujvar 1887 – Budapest 1967) fue una figura fundamental en el liderazgo de los círculos de arte de vanguardia en Hungría. Sus actividades como artista, activista o empresario le convierten en una de las figuras destacadas de las vanguardias internacionales del siglo XX. Obrero metalúrgico, de formación casi autodidacta, tomó parte muy activa en los movimientos obreros de comienzos de siglo. En 1907 atravesó Europa viajando a pie desde Budapest a París, donde contactó entre 1909 y 1912 con Apollinaire, Picasso, Modigliani y Marinetti, todos ellos presencias cruciales en el desarrollo de sus ideas estéticas. El primer grupo representativo de los artistas de vanguardia en Hungría fue el “Círculo de activistas húngaros” fundado en 1915. Inicialmente se unieron alrededor de la revista A Tett editada por Lajos Kassák, en la que encontraron una plataforma para la expresión literaria y para sus aspiraciones políticas. Además de poemas, relatos y ensayos literarios, la revista incluía estudios de estética y sociología de autores como Dezso Sabó, Mátyás Gÿorgy, Adalar Komjat, Imre Vajda y Janos Mácza y materiales de autores extranjeros como Marinetti, Kandinsky, G. B. Shaw, Walt Whitman, Apollinaire, Jules Romains, Ludwig Rubiner o Ivan Goll. Entre los ilustradores que colaboraron en la revista: Pal Pátzay, Peter Dobrovits, Bela Uitz y Josef Nemes Lampért.
En 1916, a causa de su postura antimilitarista, A Tett fue prohibida y Kassák fundó otra revista, MA(Hoy), que se editaría en Budapest entre 1916 y 1919 y en Viena entre 1920 y 1926. MA representaba las posiciones más radicales de la izquierda haciendo especial énfasis en las bellas artes. Como había hecho el grupo reunido en torno a la revista Der Sturm, también MA abrió su propia galería de arte, donde expusieron artistas como Janos Mattis Teutsch, Ede Bohacsek, Josef Nemes Lampért, Sándor Bortnyik, Lajos Tihanyi. También desde MA organizaban veladas literarias y matinales musicales a lo largo del país promocionando los nuevos lenguajes formales. Con la revolución obrera de 1919, los miembros de la revista colaboraron en las actividades propagandísticas, crearon el Estudio-taller Proletario de Bellas Artes dirigido a los jóvenes trabajadores, donde se impartían estudios de arquitectura, pintura, teatro, danza y música, carteles, murales y escenografía en una serie de talleres como el de pintura que dirigía Nemes Lampért y el de escultura dirigido por Ferenc Medgyessy.
Tras la caída de la República Húngara en 1919, la mayor parte de los intelectuales izquierdistas se vieron forzados a emigrar por la actividad política mantenida durante la etapa revolucionaria. Algunos miembros del grupo, tras una breve estancia en Viena, se dispersaron por Europa: Béla Uitz y János Mácza fueron a la Unión Soviética, László Péri fue a París y a continuación a Berlín. En la emigración recibieron nuevos impulsos artísticos decantándose cada vez más por el dadaísmo y las actividades artísticas de la joven Unión Soviética. Kassák y su grupo emigraron a Viena, en primer lugar, donde siguieron editando MA (6 volúmenes hasta 1926, en los que contó con colaboraciones de Hans Arp, Kurt Schwitters, El Lissitzky, Hewarth Walden, Alexander Archipenco, etc.). Kassák, que hasta entonces era conocido como poeta y escritor, comenzó a pintar. Su exposición individual en la galeria Würtel de Viena en 1921 marca el comienzo del intenso trabajo constructivista de Kassák y la aparición de su noción de arquitectura-pictórica. En Berlín el programa educativo de la Bauhaus atrajo a bastantes artistas húngaros como Marcel Breuer, Hugo Johan, Farkas Molnár, Gyula Pap, Andor Weininger. Kassák visitó Berlín en 1922, donde expuso en la Galería Der Sturm. Su primera poesía Dadá data de este periodo.
En su vertiente plástica tuvo gran influencia una exposición de artistas rusos de vanguardia que pudo contemplar en la Galería Van Diemen de Berlín. También en 1922 publicó en colaboración con László Moholy-Nagy la influyente antología de arte Buch neuer Künstler (Libro de Nuevos Artistas). A su regreso a Hungría en 1926 reanudó sus actividades literarias, creando la revista Dokumentum. Entre 1928 y 1938 Kassák se implicó intensamente con los círculos de izquierdas de trabajadores e intelectuales centrados en el periódico Munka (Trabajo). En los años cincuenta su trabajo fue censurado por el régimen comunista húngaro. Esto provocó su progresivo aislamiento, en el que siguió desarrollando en sus obras el estilo constructivista, creando composiciones abstractas a gran escala y collages de inspiración surrealista.
A diferencia de otros artistas húngaros como Moholy-Nagy y Gyorgy Kepes que emigraron a los Estados Unidos y fueron bien conocidos como miembros de la Bauhaus y fundadores del Instituto de Diseño de Chicago, o André Kertész y Marcel Breuer que son constantemente citados entre las mayores figuras del constructivismo, Kassák nunca fue reconocido entre los artistas del constructivismo internacional. Sus tempranas realizaciones y su posterior carrera se vieron envueltas por la oscuridad del exilio interno y del hostil ambiente político que dominó su patria. Murió en Budapest en 1967.