Colección de abanicos pintados chinos del Museo de Guangzhou

ExposiciónIVAM Centre Julio González

Esta exposición es fruto del convenio de colaboración entre el IVAM y el Museo de Arte de Guangzhou que el año pasado exhibió parte de la colección del IVAM con La Alquimia de los Herreros, y ahora trae a Valencia su colección de Abanicos Pintados Chinos.

La muestra reúne 62 piezas de las dinastías Ming y Qing y de las épocas moderna y contemporánea que forman parte de la colección del Museo de Guangzhou, entre las cuales figuran obras de muchos pintores prestigiosos, tales como Ju Lian, maestro de Gao Jianfu y Chen Shuren fundadores de la Escuela Lingnan de Guangdong que alcanzó gran fama durante la Dinastía Qing; Ren Yi (alias Ren Bonian) y su discípulo y Wu Changshuo, representantes importantes de la escuela de Shanghai del final de la Dinastía de Qing, así como de Zhang Daqian, mundialmente famoso en el siglo XX. Y, aunque otros autores no son tan conocidos, sus obras representan plenamente lo amplio y profundo del contenido del arte de la caligrafía y la pintura chinas. Hasta la actualidad, las piezas de esta colección han sido exhibidas sólo en China y, es la primera vez que se van a mostrar en el extranjero.

Los abanicos tienen una larga historia. Después de su aparición y aplicación, en la dinastía Jin del Este (317-420) se convirtió en una práctica generalizada escribir y pintar en ellos. Más tarde, en las dinastía Song,( 960-1279) llega la epoca dorada de los abanicos redondos, y sus decoraciones consiguen dictar el estilo pictórico de la corte.

Los abanicos plegables aparecieron en la dinastía Song del Sur (1127- 1279) procedentes de Japón y Corea. Durante la dinastía Ming (1368- 1644) se generalizó el uso de los abanicos plegables sobre papel donde los altos funcionarios y nobles solían escribir sus ideas y pensamientos.

En la dinastía Qing (1644-1911 la anterior a la Republica China) empieza a considerarse los abanicos plegables como piezas de coleccionismo. Desde principios del s. XX la cultura china experimenta una transformación drástica y los abanicos chinos empiezan a desaparecer de la vida diaria. Sin embargo, un número considerable de pintores del siglo XX mantuvo viva la caligrafía y pintura tradicional sobre abanicos. Sus esfuerzos revelan la experimentación que los artistas chinos realizan al aplicar nuevas técnicas a una forma ancestral de arte.